La maestra Alicia Femenías sopla su silbato y exclama: “¡silencio, Escuela Monteaguado! ¡Todo el mundo en el piso!”. Los chicos de tercer grado bajan el volumen, se sientan en el piso y miran la pantalla con los ojos bien abiertos. Entonces Alicia, cansada, suspira: “¡ah! Yo también me quedo en el piso”. Pero al agacharse se interpone sin querer entre la pared y el proyector, que muestra su sombra, y los chicos se ríen. “¡Qué cabezota tiene la seño Alicia!”, grita un nene. Ella se mueve y una acomodadora apaga las luces: uno de los chiquitos le toma la mano a una nena, todos los nenes chillan. Les encanta. Se callan cuando un tricerátops aparece en la pantalla bailando la “cumbia del dinosaurio”: ahora aplauden y se mueven divertidos en el piso. Después el dinosaurio de tres cuernos deja la escena y empieza el documental “Dinosaurios de la Patagonia”, que los tendrá absortos por 20 minutos.
Los dinosaurios son la gran atracción de Educatec, el multiespacio interactivo de divulgación científica y tecnológica del Ministerio de Educación de la provincia, que funciona en el Centro de Innovación e Información para el Desarrollo Educativo, Productivo y Tecnológico (Ciidept), en la calle José Ingenieros al 260. Un velocirraptor, un tiranosaurio rex, una tortuga del Triásico y un argentinosaurus reciben a los chicos en la entrada del edificio. Entretanto, el tiranosaurio (o la tiranosauria) ya puso dos huevos de dos metros. Y atrás del parque jurásico, en el patio, los chicos de la Escuela Monteagudo aprenden sobre los grandes reptiles en el Domo, un microcine que está dentro de una carpa con forma de cúpula.